Boca Juniors no pudo lograr la victoria en una emocionante final de la Copa Libertadores contra Fluminense. El partido se llevó a cabo en el estadio Maracaná de Río de Janeiro y terminó con un marcador de 2-1 a favor de Fluminense.
El delantero argentino Germán Cano, que juega para Fluminense, abrió el marcador a los 36 minutos del primer tiempo. Más tarde, el defensor Luis Advíncula igualó temporalmente para Boca con un impresionante gol a los 27 minutos del segundo tiempo.
La tensión aumentó cuando John Kennedy, del equipo brasileño, fue expulsado por doble amonestación a los 10 minutos del primer tiempo suplementario. Frank Fabra, de Boca, también vio la tarjeta roja directa debido a una agresión.
La final fue una batalla física y táctica, con ambos equipos luchando en el campo. Fluminense dominó gran parte del partido, pero Boca logró igualar y llevar el partido a la prórroga.
Fue durante la prórroga cuando John Kennedy marcó el gol decisivo para Fluminense a los 10 minutos del primer tiempo suplementario. Sin embargo, el jugador celebró con la hinchada y fue expulsado después de recibir una segunda tarjeta amarilla.
A pesar de estar en desventaja numérica, Boca luchó por igualar el marcador nuevamente, pero no pudo lograrlo. El partido terminó con la victoria de Fluminense, que se convirtió en campeón de la Copa Libertadores por primera vez en su historia. La hinchada tricolor se congregó para homenajear a sus héroes y dar la bienvenida al trofeo de campeón en las vitrinas del club. Fue una noche memorable para Fluminense, que quedará grabada en la historia del fútbol brasileño.