La falta de combustible en las estaciones de servicio se ha convertido en un problema cada vez más común en Argentina, y la razón detrás de esta escasez radica en el atraso de los precios de los combustibles. Los precios de los combustibles en Argentina están fijados a través de un acuerdo con el Gobierno que se estableció en agosto pasado y que ha dejado a los precios muy por debajo de los valores internacionales. A medida que la inflación avanza rápidamente, los precios de los combustibles se han quedado atrás, lo que ha llevado a una falta de rentabilidad en la operación de las petroleras, especialmente para las empresas más pequeñas del sector.
Para hacer frente a esta situación, algunas empresas decidieron aplicar aumentos no anunciados del 2,5% en el precio de los combustibles. Sin embargo, esta subida aún resulta insuficiente, y muchas estaciones de servicio optan por limitar al mínimo su abastecimiento. La Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA) ha alertado sobre esta problemática, señalando que la inestabilidad en las estaciones de servicio, causada por las distorsiones del mercado y los precios dispares, está llevando a un quiebre de stock de combustibles.
La demanda de combustible en Argentina está siendo impulsada por varios factores, incluido el atraso de los precios en comparación con los valores internacionales. Mientras que en países vecinos como Uruguay y Brasil, el precio del litro de nafta es mucho más alto en términos de dólares que en Argentina, lo que lleva a residentes de países limítrofes a aprovechar la diferencia de precios y comprar combustible en Argentina. Además, el acuerdo de "Precios Justos" que aún se mantiene en los surtidores de YPF, la empresa líder en el mercado, ha aumentado la demanda de combustibles de esta compañía, lo que provoca cortes temporales en el suministro en todo el país.
La falta de combustible afecta a los consumidores, que se enfrentan a estaciones sin stock o largas filas para cargar combustible, y también al sector del transporte, que moviliza más del 90% de la economía del país. La Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC) ha pedido la intervención de la secretaría de Energía para normalizar el abastecimiento de gasoil y ha señalado que la distorsión en los precios de los combustibles ha generado problemas que afectan el suministro de mercaderías en general.