El primer debate presidencial en Santiago del Estero reunió a los cinco candidatos que aspiran a la presidencia de Argentina: Sergio Massa (Unión por la Patria), Patricia Bullrich (Juntos por el Cambio), Javier Milei (La Libertad Avanza), Juan Schiaretti (Hacemos por Nuestro País) y Myriam Bregman (Frente de Izquierda).
El debate, dividido en tres ejes temáticos: economía, educación y derechos humanos, generó un enfrentamiento significativo entre los candidatos. En la primera parte, Milei, Bullrich, Bregman y Schiaretti centraron sus críticas en la gestión económica actual, mientras que Massa destacó su compromiso de liderar una nueva gestión enfocada en la "unidad nacional" y enmendar los errores del gobierno actual.
Sergio Massa también presentó varias propuestas, como la creación de una "moneda digital argentina," una ley de blanqueo y reformas en el sistema penal para sancionar a los evasores fiscales y a quienes evadan impuestos. Además, prometió una inversión mínima en educación del 8% del PBI, la construcción de centros de desarrollo infantil, la incorporación de robótica y programación en las escuelas y la ampliación de la oferta universitaria.
Por otro lado, Patricia Bullrich destacó su compromiso de "borrar del mapa" la inflación y mencionó al economista Carlos Melconian como su potencial ministro de Economía. Además, abordó temas de derechos humanos, comparándose con líderes como Nelson Mandela y José Mujica debido a su participación en la Juventud Peronista vinculada a Montoneros.
Javier Milei mantuvo su enfoque en promesas de campaña, prometiendo niveles de vida similares a los de países europeos y estadounidenses si llega a la presidencia. Criticó la emisión monetaria y se disculpó por agravios previos al Papa Francisco. Además, señaló a Luis Barrionuevo como parte de la "casta" sindical.
Myriam Bregman se destacó por su discurso efectista, enfocándose en las banderas históricas de la izquierda y lanzando críticas hacia sus contrincantes. Centró sus críticas en Milei, a quien describió como un "gatito mimoso del poder económico," y en Bullrich, a quien responsabilizó de la represión en casos como los de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel.
Juan Schiaretti, por su parte, destacó su experiencia en la gestión de Córdoba y propuso desdoblar el tipo de cambio y reducir los impuestos al interior del país. Se mostró en contra de la "grieta" y enfatizó la importancia del federalismo.
El debate, que obtuvo una alta audiencia televisiva, añadió tensión y expectativas al tramo final de la campaña electoral. Los cinco candidatos compartieron escenario, cumpliendo con la regla de no realizar "ataques personales." El próximo debate se llevará a cabo en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires el 8 de octubre. Los moderadores del primer debate fueron los periodistas Rodolfo Barili, Evangelina Ramallo, Esteban Mirol y Lucila Trujillo.