La policía de Misiones detuvo a Sebastián Kiczka, hermano del diputado Germán Kiczka, a solo 24 horas de la captura del diputado. Ambos hermanos enfrentan graves acusaciones de distribución y tenencia de material de abuso sexual infantil, además de su presunta participación en una red de pedofilia.
Sebastián Kiczka fue encontrado en un estado de abandono en San Juan de la Sierra, una localidad ubicada a 40 kilómetros de Apóstoles, Misiones. Estaba deshidratado, sucio y sobrevivía alimentándose de limones mientras intentaba eludir a la justicia. Para evitar ser identificado, Kiczka se había dejado crecer las patillas y el bigote, con la esperanza de cambiar su apariencia.
El plan de Sebastián Kiczka era llegar a Concepción de la Sierra y ocultarse allí hasta que disminuyera la atención mediática sobre su caso, para luego intentar huir hacia Paraguay. Sin embargo, gracias a una denuncia anónima realizada a la Línea 145, dependiente de la Secretaría de Justicia, los planes de Kiczka fueron frustrados, y la policía logró capturarlo.
Declaración del Ministerio de Justicia:
El Ministerio de Justicia de la Nación, a través de sus redes sociales, confirmó la captura de Germán Kiczka, destacando la importancia de la denuncia anónima que permitió la aprehensión del diputado acusado de pedofilia. Sebastián Kiczka fue trasladado a Apóstoles para ser indagado por la justicia junto a su hermano, aunque se dispuso que ambos sean alojados en dependencias separadas debido a la gravedad del caso y la naturaleza de las acusaciones.
La Detención de Germán Kiczka:
Germán Kiczka fue detenido el jueves por la noche en un campo en la localidad de Loreto, Corrientes, ubicada a 184 kilómetros de la capital provincial. El arresto del diputado se produjo en el marco de una investigación internacional iniciada en Estados Unidos que vinculaba a Kiczka con una red de pedofilia. Desde el 22 de agosto, Kiczka era buscado intensamente después de que la Legislatura provincial aprobara su desafuero, permitiendo que las fuerzas de seguridad pudieran proceder con su captura. Sin embargo, el primer intento de arresto en su domicilio en Apóstoles fracasó cuando Kiczka logró escapar.
El gobernador de Misiones, Hugo Passalacqua, había ofrecido una recompensa de 5 millones de pesos para quien entregara a los hermanos Kiczka, lo que incentivó a la ciudadanía a colaborar con información clave para su captura. La Interpol también se sumó a la búsqueda al emitir una alerta roja que ayudó a estrechar el cerco sobre los fugitivos.